Si estás enfrentando un tratamiento de radioterapia, es natural que tengas preocupaciones sobre cómo afectará tu vida íntima y tus sueños de formar una familia. Hoy quiero compartir contigo información valiosa y algunas palabras de aliento para este camino que estás por recorrer.
La radioterapia, puede tener efectos en tu cuerpo que van más allá del área tratada; pero no te desanimes, ¡hay opciones y soluciones!
Este artículo busca brindarte la información que necesitas para tomar decisiones informadas y cuidar de tu bienestar durante este proceso.
Empecemos por conocer, ¿Qué es la radioterapia?
La radioterapia, también conocida como terapia de radiación, es un tratamiento del cáncer que usa altas dosis de radiación para destruir células cancerosas y reducir tumores.
Impacto de la radioterapia en la sexualidad y fertilidad.
La radiación puede dañar los órganos reproductivos y provocar una menopausia precoz, lo que puede impedir que quedes embarazada; además, una disminución de los niveles de hormonas femeninas puede afectar la función y el deseo sexual. Es común experimentar sequedad vaginal, picazón y ardor, lo que puede hacer que las relaciones sexuales sean dolorosas o difíciles.
En caso de que esto suceda, ¿Qué puedes hacer?
- En el caso de que experimentes sequedad vaginal o incomodidad durante las relaciones sexuales, puedes utilizar lubricantes a base de agua para aliviar la sequedad vaginal. Evita los lubricantes perfumados o con color, ya que pueden causar irritación.
- En el caso de que se presente la menopausia precoz, existen terapias hormonales que pueden ayudarte con los síntomas. Los medicamentos de reemplazo hormonal pueden ayudarte a manejar los síntomas de la menopausia inducida por la radioterapia.
- Si el sexo es incómodo o doloroso, explora otras formas de intimidad con tu pareja. La comunicación y el apoyo mutuo son clave en estos momentos.
Y recuerda, si notas cambios en tu cuerpo o en tu deseo sexual, no dudes en hablarlo con tu médico.
¿Qué puedes hacer antes de la radioterapia para proteger tu fertilidad?
Antes de comenzar el tratamiento, es crucial que tengas una conversación honesta con tu equipo médico sobre tus deseos de ser madre en el futuro; ya que existen maravillosas opciones que podrías considerar:
- Fertilización in vitro (FIV): Se pueden extraer óvulos y fertilizarlos con esperma para crear embriones que luego se congelan para su uso futuro. También puedes optar por congelar óvulos no fertilizados.
- Crio preservación ovárica: Es un método que consiste en el congelamiento rápido de ovocitos maduros, preservando estas células por tiempos prolongados. Esto permite mantener sus propiedades biológicas una vez descongeladas, logrando conservar el potencial reproductivo de las mujeres en el futuro.
Cabe destacar que la diferencia principal entre la fertilización in vitro (FIV) y la criopreservación ovárica radica en lo que se preserva:
En la FIV, se preservan embriones ya fertilizados. Los óvulos maduros son extraídos, fertilizados con esperma en el laboratorio, y los embriones resultantes son congelados.
Mientras que en la criopreservación ovárica, se preserva tejido ovárico que contiene óvulos inmaduros. No hay fertilización en esta etapa; Se extrae y congela una porción del ovario con sus folículos intactos.
- Ovodonación: Es un tratamiento de fertilidad que ayuda a muchas mujeres a lograr el embarazo gracias a los óvulos de una donante anónima, con el semen de la pareja o de donante.
Después del tratamiento de radioterapia, la maternidad en muchos casos es posible gracias a este método de reproducción asistida.
Durante el tratamiento de radioterapia, es importante que utilices métodos anticonceptivos para evitar un embarazo, ya que la radiación podría afectar al bebé. Pero no te preocupes, esto es temporal. Una vez finalizado el tratamiento, con el visto bueno de tu médico, podrás retomar tus planes de maternidad.
Apoyo emocional y grupos de apoyo.
Los cambios en la función sexual y la fertilidad pueden ser emocionalmente desafiantes tanto para ti como para tu pareja; considera unirte a grupos de apoyo o buscar terapia para manejar estos cambios.
Lo más importante es que no te sientas sola en este proceso. Hay grupos de apoyo y terapeutas especializados que pueden brindarte el respaldo emocional que necesitas. Tus sentimientos son válidos y merecen ser atendidos.
¿Cuándo contactar a tu médico?
Es importante estar atenta a ciertos síntomas y comunicarte con tu médico si:
- Experimentas dolor nuevo o creciente durante o después de las relaciones sexuales.
- Tienes sangrado vaginal durante o después de las relaciones sexuales.
- Notas cambios en la función eréctil o en la cantidad de semen.
- Tienes cualquier pregunta o inquietud sobre tu condición o tratamiento.
En Mater Clinic, queremos que recuerdes que tú eres más que tu tratamiento, eres una mujer valiente y resiliente y este es un capítulo en tu vida, no tu historia completa. Nuestro equipo médico te brindará el apoyo necesario, adecuado y la información correcta para que puedas atravesar este proceso manteniendo tu feminidad, tu sensualidad y sueños intactos.
Eres fuerte, eres capaz, y mereces vivir plenamente en todos los aspectos de tu vida. ¡Adelante, guerrera! Si tienes dudas o preocupaciones, puedes escribirnos sin ningún compromiso o reservar una cita con nosotros, estamos en doctoralia o puedes escribirnos a nuestro número de Whatsapp al 645 096 548 o por el medio de contacto de tu preferencia, que estaremos encantados de hablar contigo!
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